Micromovilidad

Por ‘micromovilidad’ entendemos una modalidad de transporte en pequeños vehículos diseñados para trayectos cortos, ligeros y que por lo general son impulsados por el ser humano o por motores eléctricos de baja potencia. Esta forma de desplazamiento ha ganado popularidad en los últimos años como una solución de movilidad urbana eficiente y económica.

La micromovilidad urbana se ha popularizado en los últimos años porque responde a la necesidad de encontrar alternativas más eficientes y más fáciles de maniobrar, estacionar y mantener. 

Existen variedad de vehículos de micromovilidad que se utilizan a diario en las ciudades de todo el mundo. Estos son algunos de los más comunes que podemos ver circular en las áreas urbanas:

• Bicicletas. La bicicleta es, probablemente, el ejemplo más tradicional y común de micromovilidad. A las bicicletas convencionales se suman ahora las bicicletas eléctricas (e-bikes), que hacen este vehículo más accesible, ya que permiten su uso en ciudades con una orografía más dificultosa y facilitan su uso a personas de más edad o con una condición física más limitada. Muchas ciudades han puesto en marcha sistema de préstamo de bicicletas eléctricas por periodos cortos, lo que ha extendido también su utilización para los desplazamientos urbanos. 
• Patinetes eléctricos. A la vista está que los patinetes eléctricos se han convertido en uno de los vehículos para la movilidad urbana más populares en las ciudades. Son ideales para los desplazamientos urbanos cortos, ya que son ligeros, fáciles de manejar y de estacionar. Al igual que ocurre con las e-bikes, en los últimos años han proliferado las empresas de alquiler de patinetes eléctricos, que permiten a los usuarios tomar y devolver patinetes en diferentes ubicaciones mediante aplicaciones móviles. 
• Scooters eléctricos. Estos vehículos son también un vehículo de movilidad que se ha utilizado de forma tradicional en las ciudades, y que en los últimos años han evolucionado a versiones más sostenibles. Los ciclomotores y scooters son eficientes para los desplazamientos urbanos y más económicos que otros tipos de transporte como los coches y las motocicletas. Además, pueden ser utilizados tanto para el desplazamiento de personas como para el reparto.
• Segways. Los segways, esos vehículos eléctricos de dos ruedas que se maneja de pie con el balanceo del cuerpo, son una alternativa menos utilizada que otros vehículos de micromovilidad, pero suponen una opción cómoda para desplazamientos cortos.
• Monociclos eléctricos. Los monociclos eléctricos son dispositivos de una sola rueda que se controlan mediante la inclinación del cuerpo del usuario. Aunque su uso requiere de un poco de práctica, son útiles para los desplazamientos urbanos, ya que su diseño pequeño permite además guardarlos en un espacio reducido.
• Hoverboards. Los hoverboards son dispositivos eléctricos de autoequilibrio, sin manillar, que permiten a los usuarios desplazarse inclinándose hacia adelante o hacia atrás. Aunque inicialmente surgieron como una forma de entretenimiento, en la actualidad también son utilizados en la micromovilidad urbana para desplazamientos cortos.
• Coches eléctricos. Muchas compañías de automóviles se han sumado ya a la oferta de vehículos de micromovilidad, como los patinetes y las bicicletas eléctricas, y también mediante coches eléctricos que por sus características se pueden considerar también opciones de micromovilidad. 
  

Por su bajo coste, la reducción de emisiones de CO₂, las facilidades de aparcamiento… Los usuarios de los vehículos de micromovilidad encuentran en ellos multitud de ventajas, entre ellas las siguientes:

• Son más económicos. Los vehículos de micromovilidad tienen un coste más bajo que los convencionales, tanto en su adquisición como en su mantenimiento. Además, la popularización de servicios de préstamo o alquiler de este tipo de vehículos permiten también su uso puntual o recurrente a un precio económico o incluso gratis.
• Evitan las congestiones de tráfico y las reducen. Una de las características que más llaman la atención de los usuarios de estos vehículos es la facilidad de moverse con ellos por el tráfico urbano y su capacidad para reducir la congestión del tráfico, lo que también ahorra tiempo en la mayoría de los casos.
• Son más accesibles. Vehículos de micromovilidad como los scooters o las bicicletas eléctricas pueden ser utilizados por personas de diferentes edades y habilidades físicas que por diferentes razones no contemplan el coche como forma habitual de transporte. 
• Son más fáciles de aparcar. Este tipo de medios de transporte urbanos requieren menos espacio de estacionamiento que los automóviles, o incluso pueden ser transportados por el usuario. Esto es especialmente útil y beneficioso en las grandes ciudades.
• Fomentan un estilo de vida activo. El uso de formas de micromovilidad como la bicicleta, el patinete o el segway ayuda a mantener un estilo de vida más activo y saludable, lo que contribuye también a mejorar la salud.
• Son fáciles de utilizar. Una de las ventajas que ha popularizado el uso de estos medios de transporte es su relativa facilidad de manejo, si se compara con vehículos tradicionales como el coche y la motocicleta.
  

Impulsamos proyectos como Wible, el alquiler de coches eléctricos. El servicio de carsharing junto a Kia, es una de nuestras propuestas dentro de la economía colaborativa. Contamos con una flota de 650 vehículos 100% eléctricos, híbridos e híbridos enchufables, listos para recorrer Madrid y sus alrededores.

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