Ciclo combinado

Combinando gas y vapor

La central de ciclo combinado desempeña un papel importante en la transición energética al ofrecer una alternativa para la generación de electricidad. Esta tecnología combina turbinas de gas y de vapor para maximizar la eficiencia y reducir las emisiones de CO₂.

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¿Qué es una central de ciclo combinado?

Una central de ciclo combinado, también conocida como central térmica de ciclo combinado, es una instalación de generación de energía eléctrica que combina dos tipos de turbinas: una de gas y otra de vapor. Esta combinación permite aprovechar al máximo el calor generado durante el proceso, logrando una eficiencia significativamente mayor en comparación con las plantas de ciclo simple, que emplean únicamente una turbina de gas. 

¿Cómo funciona el ciclo combinado?

El ciclo combinado utiliza dos ciclos termodinámicos interconectados para maximizar la eficiencia en la generación de electricidad: el ciclo de gas y el ciclo de vapor.  

 1. Ciclo de gas 

  • Entrada de aire y compresión: se toma el aire del ambiente y se comprime a alta presión en un compresor. 
  • Combustión: el aire comprimido se mezcla con gas natural en una cámara de combustión, donde se quema para producir gases calientes a alta presión. 
  • Expansión y generación de electricidad: los gases calientes resultantes de la combustión se expanden e impulsan las turbinas, haciendo que giren. El movimiento de las turbinas está acoplado a un generador eléctrico, produciendo así electricidad. 

2. Ciclo de vapor 

  • Recuperación de calor: los gases calientes de la turbina de gas, que aún conservan una alta temperatura, pasan por un recuperador de calor, donde se aprovecha el calor residual para calentar agua. 
  • Producción de vapor: el agua calentada en el recuperador de calor se convierte en vapor de alta presión en una caldera. 
  • Expansión y generación de electricidad: el vapor de alta presión se expande en las turbinas de vapor, haciendo que giren. Este movimiento se conecta a un generador eléctrico, produciendo más electricidad. 
  • Condensación y recirculación: el vapor de agua que ha pasado por la turbina se condensa en un condensador, volviendo a convertirse en agua líquida. Esta agua se recircula a la caldera para iniciar nuevamente el ciclo. 

 

Ventajas de las centrales de ciclo combinado

La central de ciclo combinado ofrece varios beneficios significativos en comparación con la planta de generación de energía convencional, que emplean carbón o hidrocarburos como combustible. Sus principales ventajas son: 

  1. Reducción de emisiones de CO₂: gracias a su alta eficiencia, las centrales de ciclo combinado emiten menos dióxido de carbono por unidad de electricidad generada en comparación con plantas de carbón.
  2. Flexibilidad: la planta de ciclo combinado puede ajustarse a las fluctuaciones en la demanda de energía, haciendo que sean perfectas para complementar fuentes de energía primaria renovables, como la solar y la eólica. 
  3. Bajo consumo de agua: en comparación con las plantas de carbón o nucleares, la central de ciclo combinado requiere menos agua. Esto se debe a sus procesos de enfriamiento más eficientes y la menor generación de calor residual.
  4. Menor producción de residuos: estas centrales generan menos residuos sólidos y líquidos debido a la eficiencia en la conversión de energía y la tecnología de combustión que se emplea. 

Repsol y el ciclo combinado

En los últimos años, hemos reforzado nuestra presencia en este sector estratégico mediante la adquisición y operación de importantes instalaciones de ciclo combinado. Esta tecnología nos permite optimizar la eficiencia en la generación de electricidad y ampliar nuestra matriz energética. 

Nuestras centrales de ciclo combinado en España

En Repsol operamos dos importantes centrales de ciclo combinado:

  • Planta de ciclo combinado de Escatrón (Zaragoza): tiene una capacidad de generación de 818 megavatios (MW), lo que equivale a abastecer con electricidad a 500.000 hogares aproximadamente. 
  • Planta de ciclo combinado de Algeciras (Cádiz): posee una capacidad de 830 megavatios (MW), suficiente para proporcionar electricidad a cerca de 510.000 hogares.